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LA IMPORTANCIA DE TRABAJAR LA EDUCACIÓN EMOCIONAL DESDE EL COLEGIO.

  • 4 nov 2019
  • 8 Min. de lectura

La inteligencia emocional agrupa al conjunto de habilidades psicológicas que permiten apreciar y expresar de manera equilibrada nuestras propias emociones, entender las de los demás, y utilizar esta información para guiar nuestra forma de pensar y nuestro comportamiento.


Este término se usó para describir cualidades emocionales que tienen importancia para el desarrollo integral de los niños, ya que según algunas investigaciones, los niños con una Inteligencia Emocional alta aprenden mejor, tienen menos problemas de conducta, tienen mayor facilidad de resistir las presiones de sus demás, son menos violentos y tienen más empatía, a la vez que resuelven mejor los conflictos. Desarrollando: empatía, expresión y comprensión de sentimientos, control de nuestro genio, independencia, capacidad de adaptación, simpatía, capacidad para resolver problemas de forma interpersonal, persistencia, cordialidad, amabilidad y respeto.

¿QUÉ NOS PERMITE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

  • Tomar conciencia de nuestras emociones

  • Comprender los sentimientos de los demás

  • Tolerar las presiones y frustraciones que soportamos en el trabajo

  • Acentuar nuestra capacidad de trabajar en equipo

  • Adoptar una actitud empática y social que nos brindará mayores posibilidades de desarrollo personal

  • Participar, deliberar y convivir con todos desde un ambiente armónico y de paz

Es importante que los niños aprendan a manejar sus emociones para que sean seres emocionalmente inteligentes, que aprendan a relacionarse y a manejar las emociones negativas a través de sus padres, hermanos o amigos.

Las emociones condicionan nuestra conducta, pudiendo influenciar aspectos de nuestras vidas y de nuestra cotidianidad. Su manifestación, puede convertirnos en personas integradas socialmente o excluidas, es por ello que el saber controlarlas, gestionarlas y utilizarlas con la habilidad adecuada nos permitirá afrontar la vida de un modo más eficiente.


Emoción, pensamiento y acción son tres elementos muy relacionados, presentes en todo lo que hacemos diariamente, de ahí la importancia de ahondar en ese tipo de conocimiento para afrontar determinadas situaciones, ya que su comprensión y control puede resultar imprescindible para nuestra integración en sociedad, porque nos permiten adaptarnos, comunicarnos y desenvolvernos pero si falla, nos convertiremos en personas inadaptadas, frustradas e infelices para desenvolvernos en la sociedad de un modo. Gracias a las emociones podemos sentir empatía hacia otras personas, recuperar recuerdos significativos de nuestra vida e incluso superar exitosamente momentos complicados.


Las emociones son las expresiones exteriores de los sentimientos acumulados y formados en las áreas de la imaginación y la visualización. Hay cinco emociones básicas que destacan y que son 5 las reacciones primitivas que el ser humano comparte con los mamíferos, con la diferencia de que los humanos somos conscientes de ellas, sabemos que sentimos.

EMOCIÓN OBJETIVO

Afecto Vinculación

Miedo Protección y cuidado

Tristeza Retiro

Enojo Defensa

Alegría Vivificación


En la Inteligencia emocional en niños, y para saber manejar y comprender las emociones, hay que tenerlas presentes continuamente, además la infancia es una etapa crucial en el aprendizaje del manejo y control de las mismas, ya que es el momento en que mejor se adquieren los aprendizajes, y el manejo de las emociones es un aprendizaje fundamental que se encuentra a la base de los demás, por encontrarse todo lo que hacemos impregnado de emoción.

Hay que tener en cuenta, que si incluso para los adultos es difícil controlar las emociones en determinados momentos, para los niños este control es aún más complicado porque no tienen experiencias previas similares y estrategias de abordaje. Habrá niños que prácticamente carecen de control emocional, a menudo irascibles e irritables, no se les puede negar nada porque están acostumbrados a hacer y/o tener casi todo, se muestran frágiles e irritables ante los fracasos, respondiendo de manera agresiva y hostil a este tipo de situaciones (poca tolerancia a la frustración). Estas maneras de reaccionar son perjudiciales para el niño ya que puede que le limiten su integración en grupos, además de poder afectar a su salud (la experimentación de emociones negativas deriva en una disminución de las defensas, convirtiéndonos en personas vulnerables)

Los niños han de aprender a controlar su agresividad y sus reacciones indeseadas, teniendo que trabajar los adultos con ellos, sobre todo con las conductas emocionalmente inapropiadas, hay que hacer que reflexionen sobre lo que ha pasado de manera objetiva y constructiva, que entiendan la importancia de sus actos y la repercusión que tienen en los demás, así como ofrecerles alternativas de conducta positivas, lo que derivará en una mejora en su manera de pensar y actuar, y esto repercutirá en sus emociones, ya que el empleo del castigo, ante estas ocasiones, no suele resultar demasiado efectivo.


La Inteligencia emocional en el colegio

En la escuela se debe plantear enseñar a los alumnos a ser emocionalmente más inteligentes, dotándoles de estrategias y habilidades emocionales básicas que les protejan de los factores de riesgo o, al menos, que palien sus efectos negativos.

Goleman, 1995, ha llamado a esta educación de las emociones alfabetización emocional (también, escolarización emocional), y según él, lo que se pretende con ésta es enseñar a los alumnos a modular su emocionalidad desarrollando su Inteligencia Emocional.

Los objetivos que se persiguen con la implantación de la Inteligencia Emocional en la escuela, serían los siguientes:

OBJETIVOS

  • Detectar casos de pobre desempeño en el área emocional

  • Conocer cuáles son las emociones y reconocerlas en los demás

  • Clasificarlas: sentimientos, estados de ánimo

  • Modular y gestionar la emocionalidad

  • Desarrollar la tolerancia a las frustraciones diarias

  • Prevenir el consumo de drogas y otras conductas de riesgo

  • Desarrollar la resiliencia

  • Adoptar una actitud positiva ante la vida

  • Prevenir conflictos interpersonales

  • Mejorar la calidad de vida escolar

Para esto es necesario un tutor que sea modelo de equilibrio de afrontamiento emocional, de habilidades empáticas y de resolución serena, reflexiva y justa de los conflictos interpersonales, como fuente de aprendizaje vicario para sus alumnos.


FUNCIONES

  • Percepción de necesidades, motivaciones, intereses y objetivos de los alumnos

  • Ayuda a los alumnos a establecerse objetivos personales

  • Facilitación de los procesos de toma de decisiones y responsabilidad personal

  • Orientación personal al alumno

  • Establecimiento de un clima emocional positivo, ofreciendo apoyo personal y social para aumentar la autoconfianza de los alumnos

Para desarrollar la inteligencia emocional de los niños hay que tener en cuenta unos pilares básicos:

-Aprender a identificar las emociones propias y las que experimentan los demás.

-Aprender a controlar las emociones, para lo que el niño tiene que saber qué es lo que le está pasando, qué está pensando que le está haciendo sentir así para aprender a controlarse y autorregularse.

-Aprender a expresar y a canalizar las emociones, para fortalecer las relaciones y no que sea de forma contraria


Según Bisquerra las competencias se pueden adquirir, se pueden educar, por lo que es importante la educación emocional desde el nacimiento, contemplando en el sector educativo las siguientes:


Conciencia emocional: Conocer las emociones propias y las de los demás

Regulación de las emociones: Responder de manera apropiado cuando alguien experimenta alguna emoción

Autonomía emocional: Que los estímulos externos no afecten de manera drástica a la persona. Ser sensibles pero con cierto autoblindaje

Habilidades socioemocionales: Ser capaces de construir redes sociales

Competencias para la vida y el bienestar: Favorecen una sana convivencia social y personal


Todo esto podemos trabarlo con la ayuda de los perros, ya que aunque la estimulación cognitiva asistida con animales, hoy en día, sigue siendo un tipo de terapia muy novedosa, debido a que se sale de las líneas más conservadoras, aporta un punto de vista diferente y añade una nueva dimensión en la rehabilitación neuropsicológica.

Actualmente, las investigaciones están avanzando significativamente y se está tratando de normalizar el uso de los animales como parte de la terapia, sin reemplazar en ningún caso a las terapias convencionales, sino todo lo contrario, sirviendo de gran apoyo.

El apego hacia los animales, es un comportamiento innato que está presente en las especies sociales, lo que explica en un primer momento la efectividad de de la TAA. El animal funciona como catalizador y acelera un proceso que de otra forma habría sido más lento y costoso, por tanto, los pacientes tienen una evolución más rápida de lo que cabría esperar, siendo más sencillo conseguir los objetivos terapéuticos, incluso en los casos de pacientes más resistentes.

El animal, es el nexo entre el paciente y el terapeuta y es a través de su interacción como facilita el aprendizaje, la comunicación y la recuperación de las personas, con el objetivo de generalizar los resultados a todas las áreas de su vida.


Proyecto de trabajo de la I.E con perros

-Objetivos de la propuesta de innovación:

Como hemos comentado anteriormente, se pretende que los niños sean capaces de reconocer sus propias emociones y las de los demás, gestionar la frustración y las emociones negativas, trabajar la autoestima y el autoconocimiento y mejorar la asertividad.


FASE DE APLICACIÓN

1-Sesión Inicial de presentación e introducción.


2-Sesión Empatía

La idea es que, para que los niños sean capaces de empatizar con el perro, se le pone a uno de ellos el cartel con el nombre del perro y se le dice a los demás que actúen como actuarían con el perro de verdad, de esta manera, el niño ve cómo se siente el perro cuando van todos a la vez a acariciarle, a pedirle trucos…se van rotando los niños hasta que todos han pasado por el rol de perro. Luego ponen en común cómo se han sentido realizando esto

Proponer distintas situaciones y el niño tiene que decir cómo se sentiría o cómo cree que se está sintiendo la persona a la que le está pasando eso: La profe te dice lo bien que has hecho algo delante de toda la clase, Te peleas con un amigo, Vas en bici y te caes, Tu abuelo va a buscarte al cole. Fichas con dibujos que hacen una historia, las fichas las porta el perro en una bolsa.

Con el perro tumbado, los niños (uno por uno) leen un fragmento de un cuento relacionado con la empatía. Cuando han terminado todos se despiden.


3- Sesión Reconocer las propias emociones

En un tablero hay dibujadas caras de perros con diferentes emociones, tendrán que ponerles nombre, reconocerlas e imitarlas. Por cada acierto el perro hará un truco.

Otra actividad será que los niños dibujen y coloreen las emociones, se les dará papeles en blanco con la silueta de la cara del perro y el nombre de la emoción para poder completar la expresión facial del perro. Esas mismas fichas las metemos en una bolsa, el perro pase por delante de cada niño, cogen una ficha, lo representan y los demás tienen que reconocer la emoción que es. Por cada acierto el perro hará un truco.


4- Sesión Autoestima y autoconocimiento

Se coloca con los pies juntos, ponemos una señal en la punta de los pies y le pedimos que nos diga hasta dónde cree que puede llegar dando un salto muy fuerte, colocamos otra señal donde el niño nos indique. Una vez haya saltado ponemos otra marca en el punto en el que caiga y vemos qué ha pasado, si ha llegado más lejos, menos…así podemos saber cuál es el concepto que cada uno tiene de sí mismo y de sus capacidades, vemos si las metas son fácilmente alcanzables, si no lo son o qué podríamos hacer para mejorar, (se le propone que algún compañero le ayude, le anime y vemos si en grupo o con ayuda puede llegar más lejos y cómo se ha sentido) Cada vez que un niño salta, el perro hará un truco y se le dará un premio.


5- Sesión Control de las emociones negativas

Para trabajar el control de las emociones negativas (ira, agresividad, impulsividad…) se usará la “técnica del semáforo”, ya que así asocian los colores del semáforo con las emociones y la conducta.

Tendremos una cartulina con un semáforo grande dibujado, en el cual los niños colorearán las luces de diferentes colores. Iremos mostrando tarjetas con el significado de los diferentes colores para que los asocien a las emociones y conductas y lo puedan colocar al lado del color:


6- Sesión Asertividad

Se pretende utilizar el lenguaje gestual y el lenguaje verbal para expresar sentimientos. Se trata de que los niños tomen conciencia de cómo se sienten en diferentes situaciones, de las diferentes emociones que aparecen, y sean capaces de expresarlas e identificarlas en ellos y en los demás, con lo que podemos hacer un símil con la expresión corporal del perro, cómo se expresan ellos en su entorno con otros perros y con los humanos.

Les enseñamos la técnica del “disco rayado”, para que puedan aprender a comunicar deseos y sentimientos desde el respeto al otro y la autoconfianza, de una forma tranquila. Les pedimos que pongan un ejemplo de algo que quieren o no quieren hacer, que tengan claro qué es y que otro compañero le intente convencer de lo contrario.


7- Sesión Despedida

Para fomentar la unión entre el grupo harán entre todos un mural con elementos que hayamos visto durante los diferentes talleres, emociones, cosas buenas que hacen ellos, cosas buenas que hacen los demás compañeros.

 
 
 

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